Es una asociación de circo social sin ánimo de lucro con el objetivo de llegar a las personas más desfavorecidas y olvidadas a través de las artes escénicas. Su esencia y tarea consiste a aportar sonrisas a personas afectadas por conflictos bélicos y catástrofes naturales, así como personas que están en situación de riesgo o son vulnerables por las injusticias del sistema.
El proyecto de “Contaminando sonrisas” se materializó en 2015 en Nueva Zelanda, siendo la primera expedición a los campos de refugiados norteños de Tailandia. Desde este momento han realizado varias expediciones en África (Burkina Faso, Marruecos, Mauritania y Malhi), Ceuta y Melilla, a Turquía, Grecia y Líbano a los campos de refugiados de Indomeni y al Sáhara.